Aunque el Aikido, Arte la Paz, se originó con Morihei en Japón, intenta ser un don para toda la humanidad. Algunos han elegido, o elegirán en el futuro, el Aikido como su propio Camino particular, practicándolo sobre las esteras y aplicándolo a su vida cotidiana. Muchos más han sido y serán, espero, inspirados por el mensaje universal del Arte de la Paz y sus implicaciones para nuestro mundo.
§ La divina belleza. Del cielo y de la Tierra.
§ Toda la creación, miembros de una familia.
§ El término ki aparece en algunos lugares; se refiere a la energía sutil que impulsa el universo, la vitalidad que impregna la creación y que mantiene a todas las cosas juntas.
§ El Arte de la Paz comienza contigo. Trabaja sobre ti mismo y con la tarea que te ha sido asignada en el Arte de la Paz. Todos tenemos un espíritu que puede ser refinado, un cuerpo que puede ser entrenado de cierta manera, un sendero conveniente para seguir. Estás aquí con el solo propósito de darte cuenta de tu divinidad interior y manifestar tu iluminación innata. Alimenta la paz en tu propia vida y luego aplica el Arte a todo lo que encuentres.
§ No son necesarios edificios, dinero, poder o prestigio para practicar el Arte de la Paz. El cielo está exactamente allí donde te hallas y ese es el lugar para entrenarse.
§ Todas las cosas, materiales y espirituales, surgen de una misma fuente y están relacionadas como si formaran una familia. El pasado, el presente y el futuro están contenidos en la fuerza de la vida. El Universo emergió y se desarrollo desde una fuente única, y nosotros evolucionamos a través del proceso óptimo de unificación y armonización.
§ El Arte de la Paz es la medicina para un mundo enfermo. En el mundo existen el mal y el desorden porque la gente ha olvidado que todas las cosas emanan de una sola fuente. Regresa a esa fuente y deja atrás todo pensamiento autocentrado, todo deseo mezquino y toda ira. Aquellos que son poseídos por la nada poseen todo.
Si no te has unido a la verdadera vacuidad, nunca comprenderás el Arte de la Paz.
§ El Arte de la Paz funciona en todas partes en la Tierra, desde la vastedad del espacio hasta la más pequeña planta o el más pequeño animal. La fuerza de la vida lo penetra todo y su fortaleza es ilimitada. El Arte de la Paz nos permite percibir y recurrir a esa enorme reserva de Energía Universal.
§ Ocho fuerzas sostienen la Creación: movimiento y quietud, solidificación y fluidez, extensión y contracción, unificación y división.
§ La vida es crecimiento. Si detenemos el crecimiento, técnica y espiritualmente, somos tan útiles como cadáveres. El Arte de la Paz es la celebración del enlace del cielo, la tierra y la humanidad. Es todo lo verdadero, lo bueno y lo bello.
§ Una y otra vez será necesario que te retires entre montañas profundas y valles ocultos para restablecer tu lazo con la fuente de vida. Inspira y déjate elevar a los confines del Universo; expira y deja al cosmos regresar dentro de ti. Luego aspira toda la fecundidad y vitalidad de la Tierra. Por último, combina el aliento del cielo y el aliento de la tierra con el tuyo propio, transformándote en el aliento mismo de la vida.
§ Todos los principios del Cielo y de la Tierra están vivos dentro de ti. La vida misma es la verdad y esto nunca cambiará. Todo, en el Cielo y en la Tierra, respira. La respiración es el hilo que ata la creación y la mantiene unida. Cuando la miríada de variaciones de la respiración universal pueden ser percibidas, nacen las técnicas individuales del Arte de la Paz.
§ Considera el flujo y reflujo de la marea. Cuando las olas vienen a golpear la orilla, se alzan y caen provocando un sonido. Tu respiración debería seguir el mismo patrón, absorbiendo el Universo entero en tu vientre con cada inhalación. Debes saber que todos tenemos acceso a cuatro tesoros: la energía del Sol y de la Luna, la respiración del Cielo, la respiración de la Tierra y el flujo y reflujo de la Marea.
§ Aquellos que practican el Arte de la Paz deben proteger los dominios de la Madre Naturaleza, divino reflejo de la creación, y mantenerla bella y fresca. La calidad del guerrero da origen a la belleza natural. Las técnicas sutiles de un guerrero surgen tan naturalmente como aparecen la primavera, el verano, el otoño y el invierno. La calidad del guerrero no es otra cosa que la vitalidad que sustenta toda la vida.
§ Cuando la vida es victoriosa, hay nacimiento; cuando impedida, hay muerte. El guerrero está permanentemente dedicado a una lucha de vida o muerte por la paz.
§ Contempla las obras de este mundo, escucha las palabras del sabio y toma todo lo que es bueno como propio. Con esto como base, abre tu propia puerta a la verdad. No desprecies la verdad que está justo ante ti. Observa como fluye el agua en el arroyo de un valle, suave y libremente entre las rocas. Aprende también de los libros sagrados y de la gente sabia. Cada cosa -- incluyendo ríos y montañas, plantas y árboles -- debería ser tu maestro.
§ Crea cada día nuevamente vistiéndote con Cielo y Tierra, bañándote con sabiduría y amor y colocándote en el corazón de la Madre Naturaleza.
§ No dejes de aprender de la voz pura del arroyo de montaña que fluye eternamente salpicando las rocas.
§ La paz se origina con el fluir de las cosas, su corazón es como el movimiento del viento y de las olas. El camino es como las venas que hacen circular la sangre a través de nuestros cuerpos, siguiendo el curso natural de la fuerza de la vida. Si estás separado siquiera un poco de la esencia divina, estás lejos del sendero.
§ Tu corazón está lleno de semillas fértiles esperando brotar. Del mismo modo que una flor de loto surge del lodo para florecer en todo su esplendor, la interacción de la respiración cósmica hace florecer el espíritu para que de fruto en este mundo.
§ Estudia las enseñanzas del pino, del bambú y del pimpollo del ciruelo. El pino está siempre verde, firmemente enraizado y es venerable. El bambú es fuerte, resistente e inquebrantable. El pimpollo del ciruelo es vigoroso, perfumado y elegante.
§ Mantén siempre tu mente tan luminosa y clara como el vasto cielo, el gran océano y el pico más alto: vacía de todo pensamiento. Mantén siempre tu cuerpo lleno de luz y calor. Llénate a ti mismo con el poder de la sabiduría y la iluminación.
§ Tan pronto como te ocupes del "bien" y el "mal" de tus semejantes, creas una abertura en tu corazón por la que entra la malicia. Examinar, competir y criticar a otros te debilita y te derrota.
§ El brillo penetrante de las espadas sostenidas por los seguidores del Camino golpea al malvado enemigo escondido en el interior profundo de sus propios cuerpos y almas.
§ El Arte de la Paz no es fácil. Es una lucha hasta el fin, la matanza de los malos deseos y de la falsedad interior. En algunas ocasiones, la voz de la paz resuena como un trueno, sacudiendo a los seres humanos y sacándolos de su letargo.
§ Clara como el cristal, aguda y brillante, la espada sagrada no admite sitio para alojar al mal.
§ Para practicar adecuadamente el Arte de la Paz debes: calmar el espíritu y retornar a la fuente. Eliminar toda malicia, egoísmo y deseo para limpiar el cuerpo y el espíritu. Sentir eterna gratitud por los dones recibidos del Universo, de tu familia, de la Madre Naturaleza y de tus semejantes.
§ El Arte de la Paz está basado en cuatro grandes virtudes: valor, sabiduría, amor y amistad, simbolizadas por el Fuego, el Cielo, la Tierra y el Agua.
§ La esencia del Arte de la Paz es limpiar tu ser de malicia, armonizar con tu ambiente y despejar tu sendero de todos los obstáculos y barreras.
§ La única cura para el materialismo es la limpieza de los 6 sentidos (ojos, oídos, nariz, lengua, cuerpo y mente). Si los sentidos están obstruidos, la percepción se enturbia. Cuanto más turbia la percepción, más se contaminan los sentidos. Esto crea desorden en el mundo y ese es el mal más grande. Refina tu corazón, libera los 6 sentidos y déjalos funcionar sin obstrucciones, y tu cuerpo y alma enteros brillarán.
§ Toda vida es una manifestación del espíritu, la manifestación del amor. Y el Arte de la Paz es la forma más pura de ese principio. Un guerrero es responsable de detener toda discusión y toda lucha. El amor universal funciona de formas diversas; a cada manifestación se le debe permitir libre expresión. El Arte de la Paz es verdadera democracia.
§ Todos y cada uno de los maestros, sin importar época o lugar, recibieron la llamada y alcanzaron la armonía con el cielo y la tierra. Hay muchos senderos que llevan a la cima del monte Fuji, pero hay una sola cumbre: el Amor.
§ La lealtad y la devoción hacen al valiente. La valentía conduce al espíritu de sacrificio. El espíritu de sacrificio genera confianza en el poder del amor.
§ La economía es la base de la sociedad. Cuando la economía es estable la sociedad se desarrolla. La economía ideal une lo espiritual y lo material, y las mejores mercancías con las cuales comerciar son la sinceridad y el amor.
§ El Arte de la Paz no se apoya en armas ni en la fuerza bruta para triunfar; en lugar de eso nos afinamos con el Universo, mantenemos la paz en nuestros ámbitos, nutrimos la vida y evitamos la muerte y la destrucción. El verdadero significado de la palabra samurai es aquel que sirve y adhiere al poder del amor.
§ Alberga y refina el espíritu del guerrero mientras prestas tu servicio en el mundo; ilumina el sendero de acuerdo a tu luz interior.
§ El sendero de la paz es extremadamente vasto: refleja el propósito de ambos mundos, el manifiesto y el oculto. El guerrero es el templo viviente de lo divino, el que está al servicio de ese propósito.
§ Tu mente debería armonizar con el funcionamiento del universo; tu cuerpo, con el movimiento del universo; cuerpo y mente formando una unidad que se unifica con la actividad del Universo.
§ A pesar de que nuestro sendero es completamente diferente de las artes guerreras del pasado no es necesario abandonar totalmente los modos antiguos. Absorbe las tradiciones venerables en el nuevo arte revistiéndolas con prendas frescas y construye todos los estilos clásicos para crear mejores formas.
§ El entrenamiento diario en el Arte de la Paz hace que tu divinidad interior brille cada vez más. No te ocupes de lo bueno y lo malo de los otros. No estés haciendo cuentas, actúa con naturalidad. Mantén tu mente dirigida al Arte de la Paz, y no critiques otras enseñanzas o tradiciones. El Arte de la Paz no restringe, ni limita ni pone trabas a ninguna cosa. Lo abraza todo y todo lo purifica.
§ Practica el Arte de la Paz con sinceridad, y los malos pensamientos y malas acciones desaparecerán naturalmente. El único deseo que debe permanecer es la sed por capacitarse cada vez más en el sendero.
§ Los que han alcanzado la iluminación nunca cesan de trabajarse a sí mismos. La comprensión de tales maestros no puede expresarse en palabras o en teorías. Las acciones más perfectas son el eco de patrones que se encuentran en la naturaleza.
§ Día tras día adiéstrate a ti mismo, refinando tu técnica: ¡usa el Uno para atacar lo Múltiple! Esa es la disciplina del guerrero.
§ El camino del guerrero no se puede abarcar con palabras o por carta: ¡Capta la esencia y avanza hacia la comprensión!
§ El propósito del entrenamiento es tensar lo flojo, fortalecer el cuerpo y pulir el espíritu.
§ El hierro está lleno de impurezas que lo debilitan; la forja lo transforma en acero y hace de él una espada filosa. Los seres humanos se desarrollan del mismo modo.
§ Desde tiempos antiguos, el valor y el conocimiento han sido los dos pilares del Sendero: a través de la virtud del entrenamiento, ilumina tu cuerpo y tu espíritu.
§ Los instructores solo pueden impartir fragmentos de enseñanza. Los misterios del Arte de la Paz surgen a la vida a través de tu propia abnegada práctica.
§ El camino del guerrero se basa en la humanidad, el amor y la sinceridad; el corazón del valor marcial es verdadera valentía, sabiduría, amor y amistad. Acentuar los aspectos corporales de la calidad del guerrero es inútil, porque el poder del cuerpo siempre es limitado.
§ El verdadero guerrero siempre cuenta con tres armas: la radiante espada de la pacificación; el espejo de la valentía, la amistad y la sabiduría; y la piedra preciosa de la iluminación.
§ El corazón del humano no se diferencia del alma de cielo y tierra. En tu práctica ten siempre presente la interacción de cielo y tierra, agua y fuego, yin y yang.
§ El Arte de la Paz es el principio de la no resistencia. Porque no es resistente, cuenta desde el comienzo con la victoria. Los que tienen malas intenciones o pensamientos pendencieros son derrotados instantáneamente. El Arte de la Paz es invencible porque contra nada lucha.
§ En el Arte de la Paz no hay contiendas. El verdadero guerrero es invencible porque no lucha con nadie. Vencer significa derrotar la idea de disputa que albergamos en nuestra mente.
§ Herir a un oponente es herirte a ti mismo. El Arte de la Paz es controlar la agresión sin producir daños.
§ El guerrero totalmente despierto puede utilizar libremente todos los elementos contenidos en cielo y tierra. El verdadero guerrero aprende a percibir correctamente la actividad del Universo y a transformar las técnicas marciales en vehículos de pureza, bondad y belleza. La mente y el cuerpo del guerrero deben estar impregnadas de profunda calma y luminosa sabiduría.
§ Practica siempre el Arte de la Paz con vitalidad y alegría.
Fuente: El arte de la estrategia
Autor: Morihei Ueshiba
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